Influir en el grosor de la piel de cítricos

El grosor de la piel es un factor que varía dependiendo del tipo de cítrico y las exigencias del mercado. Una piel más gruesa proporciona unos niveles más altos de extracción de aceites y proporciona mayor resistencia contra las plagas y una mejor vida útil.

En el mercado de consumo fresco, una piel más gruesa se considera más fácil de pelar, no obstante, la piel demasiado gruesa tampoco es deseable.

Para la extracción de zumos, una corteza gruesa da una producción menor. Preparar un programa de nutrición a medida ayudará en gestionar el grosor de la piel según el uso que se vaya a dar a la fruta.

El nitrógeno y el potasio incrementan el grosor de la corteza, y el fósforo lo reduce. Es fundamental un equilibrio correcto de estos tres nutrientes principales.

Nitrógeno y grosor de la piel en cítricos

Nitrógeno

Se puede en manera significativa aumentar el grosor de la piel aplicando más nitrógeno. Estos ensayos muestran ejemplos de este efecto en naranja Valencia y Satsumas. Los frutos con piel más gruesa tendrán un riesgo reducido de daño durante el transporte y manejo, y menos riesgo de contagio de enfermedades.

Fósforo y grosor de la corteza

Fósforo

Altos niveles de fósforo - como en estos ensayos - pueden reducir el grosor de la corteza. Es importante hacer un balance correcto de las cantidades de fósforo y nitrógeno.

Potasio y grosor de la corteza en cítricos

Potasio

Igual que el nitrógeno, aplicaciones altas de potasio aumentarán el grosor de la corteza, como puede mostrarse en este ensayo con mandarinas.